*El 29 de noviembre se gradúan los primeros equipos, formados por funcionarios y animales, que buscan reforzar los pasos fronterizos del país.
Cinco labradores fueron los primeros alumnos graduados de la academia canina del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), creada en octubre pasado y que pretende reforzar la detección de alimentos considerados ilegales por la legislación chilena.
Según el director nacional del organismo, Aníbal Aristía, la decisión de abrir una academia propia se tomó “frente al sostenido incremento de pasajeros y medios de transporte que llegan a nuestro territorio”. De hecho, entre 2010 y 2012 aumentó un 8% el número de visitantes, lo que impactó en el control fronterizo.
Junto a los canes, se graduarán el 29 de noviembre los funcionarios del SAG que oficiarán de amos de los animales. Aristía destacó que Chile es el único país delCono Sur en contar con este tipo de formación, la cual tuvo una inversión de $ 110 millones. “Estamos siendo referentes en la detección de productos orgánicos mediante inspección no intrusiva”, comentó.
Según detalló el encargado de la brigada canina del SAG, Pablo Vergara, postularon al cargo más de 300 técnicos del ámbito agropecuario. “Nueve lograron ingresar al curso y de ellos, sólo cinco finalmente se van a graduar el próximo viernes 29 de noviembre”, dijo.
REFORZAMIENTO
La academia está emplazada en el sector de Río Blanco, a 30 kilómetros de Los Andes. La idea del SAG es formar ocho equipos al año y volver a entrenar a los 41 canes más antiguos, quienes hasta ahora eran formados con el apoyo de la PDI. Estos ya se encuentran destinados en los principales puntos de control del país, como el Puerto de Valparaíso, el aeropuerto de Santiago y los pasos fronterizos Cardenal Samoré, Chacayuta, Colchane y Monte Aymond. Los cinco equipos graduados en la academia del SAG serán enviados a Iquique, paso Los Libertadores y Punta Arenas.
De acuerdo con los registros históricos, el SAG ha podido interceptar más de 100 mil productos ilegales en los últimos siete años. La principal ventaja de esta iniciativa, destacó el director nacional del SAG, es que los equipos detectores reciben una capacitación 100% acorde con las necesidades del servicio.
El trabajo de la brigada canina se centra en detectar el ingreso de aquellos productos que deben ser declarados obligatoriamente y certificar su origen, como miel, frutas, verduras y carnes.
Fuente: La Tercera
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