*El pequeño mamífero fue encontrado merodeando al oriente de Bogotá. Expertos buscan determinar si se trata de una nueva especie.
AFP
BOGOTÁ.- Científicos de dos países sudamericanos estudian a un pequeño felino del tamaño de un gato pero con pelaje similar al de un leopardo encontrado en Colombia, para determinar si se trata de un ejemplar de una nueva especie, indicaron expertos en este país.
El mamífero fue encontrado mientras merodeaba en los cerros orientales de Bogotá.
“Creemos que es una especie distinta, pero aún estamos desarrollando la investigación, que es un proceso largo. Quizá a final de este año o a principios del próximo podríamos tener resultados”, indicó el biólogo José González-Maya.
El científico, quien integra el equipo de investigadores formado por especialistas colombianos y brasileños de la organización medioambiental ProCAT Colombia/Internacional y de la Universidad de Rio Grande do Sul, señaló que si se trata de una nueva variedad se convertiría en el felino más pequeño de América.
Animal escurridizo
Los expertos han deducido hasta ahora que el animal formaría parte de una especie diferente a otro felino que tiene aspecto similar y habita en bosques tropicales amazónicos.
Para resolver el “puzzle”, el equipo estudia los marcadores moleculares que diferencian a una especie de otra.
De acuerdo a un informe realizado por la asociación ecologista Bogotá Diversa, el animal, que habría sido descrito por primera vez en 1775, es una de las especies menos conocidas de Colombia y uno de los felinos menos estudiados del mundo.
El especímen, que recibió el nombre científico de Leopardus trigrinus, fue encontrado apenas a un kilómetro de las zonas pobladas de la capital colombiana, explicó González-Maya.
El misterio sobre estos mamíferos se ahonda debido a sus características: muestra hábitos solitarios y nocturnos y usualmente se desplaza en zonas con baja densidad de población.
“De todas formas es un llamado de esperanza que una subespecie que está categorizada como vulnerable habite cerca de una ciudad de unos 7 millones de habitantes como Bogotá”, señaló el investigador.
El mamífero fue encontrado mientras merodeaba en los cerros orientales de Bogotá.
“Creemos que es una especie distinta, pero aún estamos desarrollando la investigación, que es un proceso largo. Quizá a final de este año o a principios del próximo podríamos tener resultados”, indicó el biólogo José González-Maya.
El científico, quien integra el equipo de investigadores formado por especialistas colombianos y brasileños de la organización medioambiental ProCAT Colombia/Internacional y de la Universidad de Rio Grande do Sul, señaló que si se trata de una nueva variedad se convertiría en el felino más pequeño de América.
Animal escurridizo
Los expertos han deducido hasta ahora que el animal formaría parte de una especie diferente a otro felino que tiene aspecto similar y habita en bosques tropicales amazónicos.
Para resolver el “puzzle”, el equipo estudia los marcadores moleculares que diferencian a una especie de otra.
De acuerdo a un informe realizado por la asociación ecologista Bogotá Diversa, el animal, que habría sido descrito por primera vez en 1775, es una de las especies menos conocidas de Colombia y uno de los felinos menos estudiados del mundo.
El especímen, que recibió el nombre científico de Leopardus trigrinus, fue encontrado apenas a un kilómetro de las zonas pobladas de la capital colombiana, explicó González-Maya.
El misterio sobre estos mamíferos se ahonda debido a sus características: muestra hábitos solitarios y nocturnos y usualmente se desplaza en zonas con baja densidad de población.
“De todas formas es un llamado de esperanza que una subespecie que está categorizada como vulnerable habite cerca de una ciudad de unos 7 millones de habitantes como Bogotá”, señaló el investigador.
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