*Amparado en una ordenanza municipal de la comuna de La Florida, Juzgado de Policía Local condenó a señora a pagar $120.000 por alimentar perros vagos y tener excesiva cantidad de perritos en su hogar. He aquí su historia.
Luis Felipe Caneo
Una de las postales que se pueden ver cuando se recorren las distintas calles de la comuna de La Florida es una gran cantidad de perros abandonados, en búsqueda de una mano cariñosa que los cuide y los alimente. Una triste realidad que animalistas con un gran corazón tratan de remediar, alimentando a decenas de perritos vagos dándoles así un rato de alegría a nuestros amigos peludos.
Una de ellas es la señora Gertrudis, de nacionalidad alemana, quien decidió quedarse en Chile, comprar una casa en el Paradero 14 de Vicuña Mackena y transformarla en un refugio animaluno para distintos perritos que ella alimenta sagradamente cada día. Una labor que fue reconocida por la Municipalidad de La Florida, durante el transcurso del año 2003, cuando el gobierno comunal era encabezado por el Udi Pablo Zalaquett.
Así fueron pasando los años, donde la señora Gertrudis siguió alimentando a decenas de perros de distintos tamaños, quiltros y de raza. Una importante contribución a la sociedad que se complicó este año 2013, pues una vecina de la señora Gertrudis la demandó por tener muchos perros, malos olores y excesos de ladridos a lo largo de todo el día y noche. Dado a lo anterior, fue condenada por el Juzgado de Policía Local a pagar una multa que asciende a $120.000, medida comunicada a la afectada en el mes de Junio del presente año. El 7 de Octubre fue notificada que en caso de no pagar la multa, será condenada a reclusión nocturna.
La sanción impuesta a la señora Gertrudis se sustenta en una Ordenanza Comunal, aprobada durante el 2010 bajo la administración del alcalde actor Jorge Guajardo, la cual señala la prohibición de alimentar perros vagos en la calle y regula las condiciones en la cual deben estar los animales en los recintos privados. Ejemplo de lo anterior es el artículo 8, el cual indica: "Es obligación del propietario, tenedor o responsable, la mantención y condiciones de vida del animal. Para este efecto deberán mantenerlos en buenas condiciones higiénicas y sanitarias, procurando darle instalaciones adecuadas para su cobijo, proporcionándole alimentación y bebida, dándole la oportunidad de ejercicio físico y atendiéndole de acuerdo a sus necesidades fisiológicas.".
La Municipalidad de La Florida le había ofrecido a la señora Gertrudis un terreno municipal para localizar a todos los perritos que ella acoge, un ofrecimiento realizado bajo la era Zalaquett. Un compromiso que jamás se cumplió.
En definitiva, vemos en el caso de la señora Gertrudis nuevamente como las autoridades y la sociedad en su conjunto no valoran la acción desinteresada de personas a favor de nuestros hermanos menores. Es de esperar que se logre una solución positiva, donde se establezca un sistema de ayuda permanente para la señora Gertrudis.
No hay comentarios:
Publicar un comentario